Como madre, también lo viví. Me encontraba de repente con mi hijo pidíendome llevar a otro a casa. Si se podía, si daba el momento para hacerlo, hablaba con la madre y me llevaba uno, o en ocasiones, dos niños más...
Disfrutaba que mis hijos jugarán y tuvieran relación con los niños, más allá del horario escolar. Además de esa forma, hice amistad que aún conservo con los pàdres y mi hijo con sus amigos..
Pero no siempre se puede o se quiere. Hay ocasiones en que necesitamos estar solos con nuestros hijos o simplemente, estar tranquilos, relajados y descansar.
Y también es bueno para ellos no acostumbrarse a estar siempre con otro niño, aunque ésto suene incongruente con lo que expongo.
El niño tiene que aprender a entretenerse solo
Hacerle ver que el no estar siempre en compañía de otra persona, no es malo. Que es la forma de encontrar el hueco o espacio para hacer otras actividades, como leer, jugar con algún juguete o juego que tenemos guardado y olvidado, si le gustan las manualidades, hacer algo creativo.
Si estamos dispuestos a acompañarlo en ese tiempo, cocinar con ellos es una buena idea.
Uno piensa que actualmente, con todas las actividades que los niños tienen, no tiene por qué aburrirse o pedir querer estar con otro niño, pero si, porque jugar a los video juegos con compañia, divierte más.
El jugar solo, con juegos y juguetes fomenta en los niños la creatividad e imaginación. Desarrollan autonomía y descubren las posibilidades de su cuerpo-espacio-lenguaje.
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